Alguien tiene que hacerlo, la verdad es que pensándolo en frío , que más nos da el aforo reducido, si antes ya perdimos pasta cuando la libertad corría por nuestras venas y programábamos autenticas joyas en la ciudad y nos dábamos la ostia ...así que el consejo de sabios del WIC pesamos que ahora más que nunca es cuando hay que programar y darnos deliciosos caprichos, com o este NESTOR PARDO, delicia de la vida lo tendremos en formato trio para invitarnos a una taza de bourbon mientras miramos el horizonte y deseando que esta puta mierda termine ya. Ahora que promotores locales no pueden hacer nada debido a la situación, creemos que es ahora o nunca cuando debemos de programar, total es la ventaja de la independencia. Después de 15 años ininterrumpidos de carrera, y tras haber saboreado todos los géneros que han dibujado la música popular moderna (rockabilly, rythm and blues, country, folk, pop), Néstor Pardo cierra uncírculo vital en Letters from Clarksdale. Tras el largo viaje, ha asumido definitivamente el papel que le corresponde a nuestra generación: ser el vaso transmisor generacional entredos mundos, uno que viene y otro que seva, mostrando la razón de la esencia universalidad del blues. Está claro es que, desde los años 20 del siglo pasado, hasta los albores de los años 20 del siglo XXI, esta obra dibuja una línea fina e invisible de continuidad existencial que mantiene la llama viva. Desde un porche en Clarksdale hasta el improvisado estudio de unpiso confinado en la ciudad de La Coruña. Sí, escierto; como dice Skip James en Hard Time Killin’Floor Blues, “hard times is here and everywhereyou go/Times are harder than ever been before”