Grandilocuentes Monocotiledóneas da su primer concierto en Bar Calvario, y dadas las circunstancias actuales de pandemia, crisis ambiental y social, disfraces para perros y burocracia, puede que también el último. Pero que eso no nos deprima. Desde el fondo del pozo solo se puede subir, o regocijarse en el charquito de agua. En este concierto chapotearemos y nadaremos un ratito juntes, y miraremos las nubes de arriba imaginando qué forma tienen.

Una experiencia única que no te puedes perder. Compra ya tus entradas, eligiendo la que más se ajuste a tu poder adquisitivo y tu moralidad.

Nos vemos el sábado 22 de enero a las 20:00 en el Bar Calvario.