El segundo de los conciertos nos lleva a uno de los binomios más importantes de la historia de la música, conformado entre Wolfgang Amadeus Mozart y Ludwig van Beethoven. Dos artistas que constituyen la bisagra entre el clasicismo y el romanticismo, con una producción artística que se muestra en muchas ocasiones engarzada. Por este motivo, el programa cabalga las obras en función de sus influencias para mostrar una progresión estilística que tomará la obra de Mozart como centro.

La primera de las obras interpretadas será Abertura de Iphigenia in Aulide, de C. W. Gluck, una obra compuesta por el artista que configura la estructura de la ópera alemana del clasicismo y cuyos pasos seguirán los compositores posteriores de su entorno -Mozar y Beethoven entre ellos-. El final que se interpretará de esta obra fue compuesto por Mozart, mostrando nuevamente la vigencia e importancia de esas conexiones estilísticas.

En este programa, Severino Ortíz Rey será el solista convidado para interpretar Concerto para piano Nº 20 en Re menor K466, de W. A. Mozart, lo cual cuenta con una cadencia escrita por el chico pianista y admirador su L.v. Beethoven.

Por último, el programa finalizará con la interpretación de la Sinfonía Nº 1, Op. 21, de L. v. Beethoven, una interesantísima obra compuesta en 1800 y que sigue los principios del clasicismo con su indiscutible estilo personal.

Programa:

Abertura de Iphigenia in Aulide, de C. W. Gluck (Final de Mozart)

Concierto para piano Nº 20 en Re menor K466, de W. A. Mozart (Cadencia de Beethoven)

I. Allegro

II. Romanza

III. Rondó: Allegro assai

Sinfonía Nº 1, Op. 21, de L. v. Beethoven

I. Adagio molto – Allegro con brio

II. Andante cantabile con moto

III. Menuetto. Allegro molto e vivace

IV. Adagio – Allegro molto e vivace

Solista: Severino Ortiz Rey

Dirige: Manuel Martínez Álvarez-Nava